Con este post empiezo una nueva sección de entrevistas a violistas destacados para así aproximarnos a ellos y conocer de primera mano sus inquietudes, consejos, anécdotas y todo lo que conlleva una entrevista en sí misma.
En primer lugar, me gustaría dar las gracias a Brett Deubner por su cercanía y predisposición inmediata para colaborar en mi blog, así que muchas gracias por tu interés.
La entrevista la voy a dividir en dos posts dada su extensión. Así que sin más, vamos primero a conocer un poco de quién es nuestro protagonista de hoy.
Brett Deubner es un violista estadounidense nacido en 1968 en California. Es uno de los más consumados violistas de su generación. Ha interpretado como solista en más de 70 orquestas por los 5 continentes. Dado su alto compromiso de ampliar el repertorio para viola ha participado en muchas colaboraciones con muchos de los más importantes compositores de la actualidad (Richard Danielpour, Andrea Morricone, Samuel Adler, Lalo Schifrin, Andrew Rudin, David Del Tredici, Joseph Turrin, Maurizio Bignone, Carlos Franzetti). Tiene más de 15 CD grabados con diferentes sellos discográficos. Además de su abundante agenda como solista y colaboraciones en la música de cámara, Brett Deubner tiene una gran actividad docente. Es el profesor de viola de la Aaron Copland School of Music en New York. Podéis encontrar más información en su web oficial.
Con estas reseñas, vamos al ataque con la primera parte de la entrevista.
Empecé tocando el violín cuando tenía 9 años. Mi primer contacto con la viola fue durante mi primer año en la Eastman School. Probé la viola de mi compañero de cuarteto e inmediatamente me enamoré de su sonido. ¡Quedé completamente vendido! Estoy muy contento de que mi profesor de violín me sugiriera que finalizara mis estudios de violín al mismo tiempo que empezaba los de viola con la gran violista y fundadora del Cuarteto Cleveland.
El verdadero problema está en la manera en la que se plantea esta pregunta. ¿Por qué uno debe de elegir entre interpretar o enseñar? Hoy en día, las Universidades buscan profesores de carrera pero para poder ofrecer a los estudiantes la visión de una carrera profesional es crucial seducir por igual a jóvenes intérpretes y profesores. Estas dos opciones son en realidad dos caras de la misma maravillosa moneda. “Enseñar es aprender dos veces”, así que creo que cada intérprete debe enseñar y cada profesor debe de intentar ser el mejor intérprete posible. Se debería hacer ambas cosas.
Mi pieza es aquella que estoy tocando durante esa semana. Se han escrito muchas composiciones fantásticas para nuestro instrumento. Para mi, una pieza exitosa es aquella que habla al corazón, es honesta y llena de cualidades que hacen una buena historia. La historia puede ser feliz o trágica… como narradores que somos, nuestro trabajo es contar la historia y ayudar a conectar con el público.
Encuentro en todas las piezas elementos difíciles. La gente se ve atrapada en la “técnica” de los desafíos de la mano izquierda, pero muy a menudo, la melodía más simple puede ser de lo más difícil. “Le Cygne” de Camille Saint-Saëns (El Cisne, del Carnaval de los Animales, original para violonchelo y piano, es mi bis favorito) es música sublime pero también extremadamente desafiante. La cuestión es que no pienso en la música en términos de “lo difícil que es”. Trabajas la técnica, ¡trabajo escalas literalmente todo el tiempo! Disfruto del “proceso de aprender música” y las actuaciones son una parte crucial de este proceso.
¡Esta es una gran pregunta! Muy a menudo a los alumnos se les enseña primero a aprender las notas y luego a añadir el fraseo y el resto de aspectos musicales. Siento que hay que combinar la “música” con la “técnica” desde el inicio del proceso. Cuando trabajo en un nuevo concierto (¡parece que sea algo diario!), realmente disfruto tocando la pieza lentamente pero también muy musicalmente. Mi consejo es que se estudie la pieza nueva por secciones, no la pieza entera cada día. Hay que coger pequeños fragmentos y centrarse en ellos. Tocar muy lento, analizar los cambios de posición, elegir las digitaciones apropiadas, trabajar la velocidad adecuada de l arco y el fraseo,… todo al mismo tiempo. Esta es la manera más rápida de aprender una pieza, técnica y musicalmente al mismo tiempo.
¡Otra buena pregunta! El mundo de la música es muy desalentador. Se te presentarán muchos desafíos. Algunas cosas para reflexionar:
Mi profesor de Master en la Eastman School of Music, el legendario solista de música moderna del siglo XX John Graham, un día me desafío a mirar las cosas que hacemos todos los días bajo una luz diferente. Así pues poder ver las ideas desde diferentes ángulos. Esto me ha guiado a lo largo de mi carrera como músico.
En realidad, mi padre fue, y sigue siendo, mi guía más importante. Él no era músico. Era un hombre de negocios. Tenía una gracia especial, siempre amable y lo más importante, empático. Él me decía “nunca juzgues a nadie” y también me ayudó a ser una persona paciente.
A menudo, uno echa la vista atrás y muchos años después se da cuenta de quienes fueron sus maestros más influyentes. Sí, tuve grandes maestros de violín y de viola, pero mi padre me enseñó el valor de ser una buena persona.
Admito que todos mis ídolos fueron (y son) violinistas. El nivel interpretativo de la viola está en aumento y es una maravillosa noticia. Cada vezmás jóvenes violistas están hacienda grandes cosas. Miro hacia músicos que me conmueven: Heifetz, Milstein, Oistrakh y violinistas de hoy como James Ehnes, Vilde Frang, AnneSophie Mutter y Christian Tetzlaf. Todos ellos ofrecen experiencias maravillosas para el oyente. ¡Me encanta su manera de contar historias!
Como te habrás dado cuenta, no soy de los que tienen “favoritos absolutos” en ninguna área. Esta manera de pensar es demasiado restrictiva para mi. Me encanta la música coral de Eric Whitacre y la exuberancia de la música folclórica búlgara cantada por el increíble Eva Quartet. Soy un gran admirador de Oscar Peterson, el gran pianista de Jazz. Rachmaninoff es uno de mis favoritos, pero también lo es Mozart. Su Réquiem es heroico.
Mi hijo constantemente me está enviando música fantástica de hip-hop para escuchar en mis múltiples viajes. Y también soy un gran admirador de Alicia Keys.
Os dejo un vídeo en el que Brett interpreta el primer movimiento del Concerto en do menor de J.Ch. Bach (Casadesus) junto a la New Jersey Symphony Orchestra bajo la dirección de Charles Banks.
Próxima semana, la segunda parte de la entrevista.
Un saludo,
Carlos 😉