En el post de hoy os voy a hablar de una combinación de música de cámara, muy novedosa en su momento, pero que poco a poco a lo largo de loas años fua ganado muchos adeptos y se llegó a hacer muy popular. Esto se traduce en la composición de muchos trabajos para esta formación: viola y clarinete (o viceversa) junto al piano (aunque tenemos algún ejemplo como el Doble Concierto Op. 88 para viola, clarinete y orquesta de Max Bruch. Si de danza habláramos, diríamos que estamos ante la perfecta pareja de baile, acompañados eso sí, siempre por el piano.
La primera composición que tenemos como protagonista a la viola y al clarinete es la que realizó Mozart en 1786. Mozart siempre tuvo un interés en la experimentación de los empastes tímbricos buscando nuevas fórmulas de agrupaciones musicales para su música. Un claro ejemplo de ello es el Trío en Mi bemol Mayor para piano, clarinete y viola K.498. A esta pieza se le conoce con el sobrenombre de Kegelsttat-Trio debido a un testimonio de que fue compuesta por el compositor durante una partida de bolos. Pero lo cierto es que el Trío fue escrito para una ejecución privada en casa de la familia Jacquin. Esta estreno estuvo interpretado por la joven Fraziska Jacquin al piano (alumna de Mozart), el virtuoso Anton Stadler al clarinete y el propio Mozart a la viola. Ambos instrumentos, viola y clarinete, eran muy apreciados por Mozart por su timbre opaco y dan una connotación expresiva contemplativa y melancólica. La presencia del clarinete se traduce en una gran abundancia melódica y la viola, por su parte, no se limita a un simple papel de acompañamiento ya que asume un rol completamente solístico. El trío consta de tres movimientos: Andante, Menuetto y Rondó.
Mozart abrió la puerta y animó a que compositores de la talla de Robert Schumann o de Max Bruch realizaran composiciones usando la misma formación. Esta combinación tiene un empaste tan melancólico, oscuro y elegante al mismo tiempo que queda patente en todas las composiciones para la formación.
Robert Schumann compuso Märchenerzählungen (cuentos de hadas) para viola, clarinete y piano Op. 132. La pieza, que consta de cuatro movimientos fue compuesta entre los días 9 y 11 de octubre de 1853 poco antes de su colapso mental e intento de suicidio. Sin embargo, la música es concisa y alegre, los cuatro movimientos vinculados por un motivo que se repite. En el transcurso de los cuatro movimientos se va notando una agitación creciente y continua.
Por su parte, Max Bruch, compuso las 8 Piezas para clarinete, viola y piano Op. 83 y también el Doble Concierto para Clarinete, viola y Orquesta en mi menor Op. 88. Las 8 Piezas fueron escritas en 1910 y el concierto se escribió en 1911. En las piezas, todas menos una escritas en modo menor, reflejan un sensible y emocional romanticismo usando para ello las características tímbricas de la formación. Además de estas composiciones de Bruch, cabe destacar también una pieza para viola solista y orquesta, su Romanza Op. 85 compuesta en 1912, la cual destaca por ser un trabajo lírico y expresivo realzando las características tímbricas y sonoras de la viola.
Aparte de estas composiciones, que podrían considerarse como las más importantes y representativas para la formación, existen numerosas composiciones. Podéis consultar un catálogo de algunas de las composiciones para la formación directamente en este link.
Además os dejo un archivo para descargar en el cual podéis encontrar las partituras de tríos para clarinete, viola y piano. Desde este link podéis acceder a la descarga directa.
Os dejo para escuchar íntegro en sus tres movimientos el Kegelsttat-Trio de Mozart en la interpretación del Bruch Trio con Jerry Kirkbride al clarinete, Jesse Levine a la viola y Rex Woods al piano.
También os dejo el audio del primer movimiento, Andante con moto, del Concierto de Max Bruch para Clarinete, Viola y Orquesta Op. 88 interpretado por Paul Meyer al clarinete, Gérard Caussé a la viola y la Lyon Opera Orchestra dirigida por Kent Nagano.
Por último, os adjunto el vídeo de Märchenerzählungen interpretado por Bil Jackson al clarinete, Toby Appel a la viola y Jon Nakamatsu al piano.
Espero que os haya gustado el post.
Un saludo,
Carlos 😉
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