En el post de hoy voy a mejorar una antigua entrada en la cual ya os hablaba de cómo afinar la viola (o el violín o el violonchelo). Esta mejora viene motivada por una necesidad real encontrada en mis alumnos. Este blog, nace en un principio para mis alumnos del Conservatorio de La Vall d’Uixó, pero viendo que las nuevas tecnologías y todos los recursos que ofrecen podían ser útiles para otros alumnos, decidí hacerlo en abierto y así tener una mayor difusión.
Con la información que había en el post, los alumnos más pequeños no terminaban de entender muy bien el funcionamiento de un afinador electrónico y los signos tan extraños que les presentaba.
Así que vamos allá, a intentar simplificar al máximo el funcionamiento del afinador y que sirva de orientación para los alumnos y para los padres y que también puedan echarles una mano a los más pequeños.
Cuando empezamos a tocar, lo primero que necesitamos es tener nuestra viola bien afinada. En el caso de que no tengamos a alguien que nos pueda afinar, hoy en día, gracias a las nuevas tecnologías y a los Smartphone, podemos tener un afinador de garantías en nuestro bolsillo. Tan solo necesitaremos entrar en la tienda de App Store en el caso de Iphone o bien en Google Play si tenemos un terminal Android. Una vez ahí, tenemos que buscar alguna app con tuner, que es afinador en inglés.
Vamos a encontrar una gran cantidad de aplicaciones gratuitas en las dos plataformas. Incluso, hay alguna que incluye el metrónomo y también la opción de grabadora. Para los músicos, ya seamos amateurs, estudiantes o profesionales, tener una herramienta tan cercana para podernos grabar y escuchar nuestros progresos, nos va a resultar muy útil. Además, esas grabaciones, las podemos enviar por correo electrónico ampliando así mucho más las posibilidades, por ejemplo las pedagógicas.
Los afinadores no usan las notas con el nombre que nosotros conocemos, es decir, el sistema latino. Usan el sistema alemán o anglosajón, un sistema que utiliza letras. La equivalencia es muy sencilla teniendo en cuenta que se empieza por la letra A y equivale a la nota LA, la B es el SI, la C es el DO,…. En esta tabla lo vemos más esquematizado.
Para que resulte más cómodo primero, podemos practicar la afinación utilizando el pizzicato, así tendremos mayor libertad para manejar los tensores o bien las clavijas.
En el afinador tenemos que ir buscando la nota de la cuerda. Por ejemplo, si queremos afinar la primera cuerda en la viola, el LA, tenemos que buscar la nota A en el afinador. Si no está muy desafinada, nos marcará la nota A y la varita del afinador puede que vaya hacia la izquierda o a la derecha. Si está a la izquierda, es que está baja la afinación y tenemos que subirla. Se realizará girando el tensor en el sentido de las agujas del reloj. Por el contrario, si está hacia la derecha, significará que la afinación es demasiado alta, y por tanto habrá que bajarla. Para ello, giraremos el tensor al contrario de las agujas del reloj.
También podemos encontrarnos que la cuerda esté muy desafinada, muy floja y tengamos que hacer uso de la clavija. Para ello, estando sentados y apoyando la viola en nuestras piernas hacia nosotros, giraremos la clavija en sentido contrario a nuestra cabeza, creando así tensión en la cuerda y subiendo la afinación. Esta tarea se realizará con mucho cuidado y muy poco a poco ya que si se hace bruscamente podemos romper la cuerda. Para ello, iremos comprobando con el afinador la nota que nos vaya dando hasta conseguir la deseada.
Para rectificar la afinación, después del uso de las clavijas, se puede hacer uso del tensor tal y como he explicado antes.
Una cosa muy importante a tener en cuenta son las notas que aparecen en el afinador con BEMOL (♭) o con SOSTENIDO (♯). No es lo mismo una nota sin ese signo que con ese signo. Por lo tanto, tenemos que buscar la afinación sin esos signos. El bemol baja la afinación un semitono, por lo tanto, tendremos que subir la afinación de nuestra viola. El sostenido sube la afinación un semitono por lo cual, bajaremos la afinación.
Como veréis en las fotos del afinador, hay unos números: 440.0 Esto hace referencia a la frecuencia en la que se afina el instrumento. Esta frecuencia, puede ser más alta o más baja. En orquesta, normalmente se suele afinar el LA (A) a 442Hz (hercios).
Para que os sea más sencillo recordar los pasos de afinar os los dejo aquí resumidos y numerados con las tablas de equivalencias para los instrumentos de cuerda: violín, viola, cello y contrabajo.
Espero que os sea útil este post.
Un saludo,
Carlos 😉
1 Comment
Muchas gracias por este post.
Me ha sido de mucha ayuda.